Foto de mi álbum |
Que las redes sociales de ámbito deportivo están que arden con esto de la liguilla de ascenso de la UD Las Palmas, es algo comprensible.
Que no paro de recibir sms y whatsApp en mi móvil, todos ellos relacionados con el partido de vuelta que jugará mañana domingo la UD, a las seis de la tarde en Almería, también es comprensible, y, es más, lo agradezco y lo estoy disfrutando.
Pero que tantas horas antes yo tenga este tembleque en el cuerpo, y, cuando la memoria me recuerda el día D y la hora H, a mí se me suban los ovarios hasta el cuello, como si fueran parte de una gargantilla, no sé qué pensar, pero creo que me estoy volviendo majara.
Mis cafés del día, que no son muchos, últimamente son descafeinados, por si acaso. No sé si quiero seguir leyendo noticias y comentarios acerca de todo esto o si aislarme viendo alguna película, o leyendo, aunque tampoco me concentro. Hace un rato dejé de planchar, y anteriormente de organizar mis cosas, porque no me evado. Ahora mismo soy un ser de pensamiento único.
No hago sino darle vueltas a una idea desde ayer por la tarde: coger el coche mañana, sobre las cinco de la tarde, y poner rumbo hacia la cumbre; al llegar a ella apagaría el móvil y daría un paseo por el Pinar de Tamadaba, porque ahora mismo no sé si mi cuore aguantará el envite de mañana.
Esto no es broma, y no recuerdo, en muchos años, un preámbulo con tantos nervios.
Amigos, tómense esto como un desahogo, porque no es más, y perdón de antemano si contagio a alguien que hasta ahora haya logrado mantenerse tranquilo.
Yo no quiero ni imaginar como subamos a primera la que se puede liar, que emoción, tienes toda la razón!!!! Rosa Martín
ResponderEliminarRosa, será una emoción sin parangón, porque trece años alejados de la Primera División, más los anteriores a ese corto paréntesis, son demasiados años.
EliminarUn beso.
Malena, sube al techo de nuestra isla, el mítico Roque Nublo, y, a su sombra, reza, si sabes, y, si no, aíslate. Como dicen los mejicanos: "El corrido lo dirá". Ya veremos si nuestros nervios terminan en una "comida de uñas", o ante un gin-tonic preñado de albricias y buenas nuevas,en la Plaza del Pueblo, v.g. Plaza de la Victoria.
ResponderEliminarAlgún día, cuando pase este marasmo, te contaré la estrecha relación que, tanto a mí como a mi padre, nos unió con tu padre el muy querido Choó-Juáa. No eches este comentario en saco roto, que tengo mucho que decirte. Buenas noches y, "ajolá, cristiana", podamos cantar el alirón. Un cariñoso saludo,
Pues sí, que no te quepa la menor duda que de seguir con esta tensión 'emigraré' hacia los altos.
EliminarDemasiada emoción acumulada tenemos todos, Ana María.
Claro que tendremos que hablar, para que me cuentes cosas acerca de esa relación.
Un abrazo.
O sube al Pico de Las Nieves, que tiene los mismos metros que el año que se fundó el Club. Besos
ResponderEliminarPatricio, no es mala idea. Gracias por la sugerencia.
EliminarSerá el lugar idóneo para respirar durante la larga espera.
Más besos y suerte a todos!!!!