Mañana juega la UD Las Palmas en el estadio de Gran Canaria frente al CD Numancia. En la actualidad el equipo de Soria tiene cuarenta y seis puntos. Nuestro equipo cuarenta y cuatro, y de darse la victoria lo superaríamos en un punto. He estado mirando el calendario y sigo pensando en que hay mucho en juego, y más motivos todavía para seguir soñando. De los once partidos que nos quedan por disputar, nos vamos a enfrentar en casa con seis equipos: Numancia, Recreativo, Huesca, Cartagena, Hércules y Sabadell. Fuera lo haremos con: Xerez, Villarreal B, Deportivo, Elche y Barcelona B.
Todas las personas que llevamos tantos años alrededor del fútbol, sabemos que no hay enemigo pequeño, y que el que menos imaginamos puede liarla con un episodio sorpresivo en el campo. Tenemos ejemplos claros, sobre todo en Copa del Rey, de equipos como el Real Madrid o Barcelona, considerados los mejores del mundo, que han caído estrepitosamente frente a otros de categorías inferiores. En esta Segunda A, la nuestra, por ahora, no podemos fiarnos de nadie; tenemos que salir siempre con el cuchillo entre los dientes a pelear todos los partidos, porque la primera meta es lograr la permanencia; una vez conseguida, y prácticamente es nuestro caso, hay que intentar alcanzar el siguiente objetivo que es jugar la liguilla. Ahora estamos viviendo esto, confiando en las posibilidades de nuestro entrenador y en las de los jugadores, y, por supuesto, esperando el apoyo de toda la afición que es fundamental, como siempre ha sido.
A estas alturas de la temporada y a falta de once jornadas para que concluya, se aprecia la regularidad de cada equipo y, a priori, se puede intuir quiénes pueden hacer más daño o con cuáles tenemos más posibilidades de tener fortuna. Siendo muy consciente de que esto es fútbol, y de que cualquier resultado está en el aire, he observado que, en los once partidos por jugar, sólo cuatro equipos están por encima de la UD: Deportivo, con sesenta y seis puntos, que va como un meteorito por lo que hay que olvidarse de él; Numancia, a sólo dos de distancia; Hércules, a siete puntos de diferencia, y Elche, a tres. Los demás están situados en la tabla en puestos por debajo del que ocupa nuestro equipo, el décimo, y aún quedan treinta y tres puntos en juego. Por lo que, insisto, tenemos que llenar las gradas del estadio de Gran Canaria mañana sábado, para alentar a la UD Las Palmas, como sólo esta afición sabe hacerlo, conseguir ganarlo y así, seguir soñando...
No hay nada perdido, todo lo contrario, aún hay mucho por escribir. Pero es una lucha que debemos vivirla entre todos, y la afición amarilla siempre ha librado buenas batallas.
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