Es evidente
que somos lo que somos y que gran parte de nuestras actuaciones se
derivan del aprendizaje que hemos recibido de nuestros padres, o en
su defecto de nuestros educadores. De niños hemos ido escuchando
frases aleccionadoras, que nos han acompañado en esa complicada
etapa de la adolescencia, para convertirse en nuestra madurez en
ciertos referentes que nos empujan a caminar por la vida de la mejor
manera. Siempre tengo presente una frase que mi madre repetía sin
cesar a sus hijos: En cualquier cosa que desempeñes, pon toda
la carne en el asador.
A pesar de
mi apasionamiento por la Unión Deportiva Las Palmas, que no es más
que el de otros seguidores del equipo, siempre intento analizar su
naturaleza de la forma más sosegada posible, queriendo ser objetiva.
Durante la primera vuelta hemos sacado 28 puntos de los posibles 63,
o sea, hemos rozado la mitad de ellos. Desde que comenzó la segunda,
el veintiocho de enero, hemos jugado 13 jornadas. De los posibles 39
puntos hemos sacado 18, aproximadamente la mitad también, un bagaje
que no está nada mal si tenemos en cuenta lo siguiente: si un equipo
lograse ganar los 42 partidos de la temporada (cosa prácticamente
imposible) obtendría la friolera de 126 puntos, pero, ganando la
mitad (los que se juegan en casa), como es el caso del Deportivo,
Valladolid, Celta... se colocan en la parte alta de la tabla, con el
más que seguro ascenso de categoría.
La UD duerme
en estos momentos con 46 puntos, en tierra de nadie, sobre un colchón
que no es de crin, pero tampoco de látex, en una zona que, de
terminar así, ni fu ni fa. Y yo repito lo que dice nuestro
entrenador, Juan M. Rodriguez, e incluso algunos jugadores de la
plantilla: que quedan puntos para la pelea, para estar bregando por
algo más. Pero, al día de hoy, tengo la sensación de que no se
está poniendo toda la carne en el asador para luchar por jugar la
liguilla. Después de tres victorias consecutivas frente al Girona,
Murcia y Celta, hemos entrado en una dinámica de tres empates y dos
derrotas, habiendo perdido una magnífica oportunidad de ganar al
Numancia y después al Huelva, partidos consecutivos en el Gran Canaria. No
creo que sea acertado pensar en las ocasiones de gol que la UD
tiene en cada partido y no culmina, y lamentarnos de eso, porque de
nada vale. En esta perra categoría este argumento no sirve; aquí
ganan los equipos que llegan dos veces a puerta y dos veces la
enchufan, y mientras, que hagan todo el juego bonito que sepan hacer.
Sí me preocupa la apatía que estoy notando en el campo, como si ya
todo estuviese hecho, como que ya no hay más carne para asar.
Existe un
refrán, procedente de la jerga taurina, que viene como anillo al
dedo: Hasta el rabo, todo es toro. Y yo espero y confío
en que así sea. Aunque a veces me parece que a este toro le quieren
cortar el rabo antes de tiempo, y eso traería cola.
En los dos últimos partidos el equipo ha estado muy apático, y es raro, puesto que estando el 1er objetivo virtualmente cumplido, los futbolistas deberían de jugar con buena predisposición sin miedo al resultado (pudiendo no ganar como en los tres anteriores, pero en esos tres partidos sí hubo buena actitud). Ojalá Las Palmas ponga este sábado toda la carne en el asador como bien comentas. Porque de lo contrario con la permanencia en el bolsillo y la promoción de ascenso muy lejana, la temporada se nos va a hacer muy larga (con todo el alboroto que eso conlleva). Un abrazo Malena.
ResponderEliminarEs verdad, Bryan, sin presión se supone que los futbolistas tendrían que divertirse en el campo, y no jugar como lo están haciendo últimamente. Veremos qué pasa este sábado... y el resto de la temporada. Un abrazo.
EliminarMalena, justo un día después de mi anterior comentario diciendo que la temporada se puede hacer muy larga por todo el alboroto que conlleva, se han producido las declaraciones de Barbosa. Yaya casualidad. A eso me refería. El equipo debe de volver a ganar partidos para que aunque no se logre llegar a la promoción, por lo menos que el vestuario no entre en descomposición, y que incluso, esa descomposición afecte al vestuario la temporada que viene. Saludos.
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