SENTIDO Y EFECTIVIDAD

Inolvidable va a ser esta tarde para todos los aficionados amarillos porque, sin duda, ha sido completa en todos los sentidos. La jornada ya comenzaba bien con la visita al Estadio de Gran Canaria de los integrantes de la peña de La Bañeza, desplazados desde León para animar a la UD Las Palmas en este partido frente al RC Celta de Vigo. En la mente de todos estaba ganarlo, por muchas razones: la primera, obviamente, por conseguir otros tres puntos alentadores para, como apunté en la última entrada, hacer más larga la temporada de cara a otro objetivo mayor. La segunda razón era llenar de alegría, no sólo los nuestros, sino también los corazones de esos leoneses que con tanto entusiasmo aterrizaron ayer temprano en Gran Canaria para animar a su equipo. Para mí hubo otra razón de índole sentimental y era brindarle esta victoria a nuestro jugador Estévez, recientemente fallecido, que dónde quiera que esté la habrá disfrutado como todos nosotros.

Cuando llegué al estadio me dirigí a saludar para darle personalmente la enhorabuena a Germán Dévora, nuestro Presidente de Honor, por el Roque Nublo de Plata que le otorgaron el pasado jueves. Al verle tuve la intuición de que ganaríamos este partido, quizás porque el ambiente a su alrededor era positivo, ya que todos apuntaban con seguridad a que Las Palmas esta tarde se llevaba el gato al agua. Y así fue, y además con un resultado holgado frente a un equipo que con toda probabilidad estará la temporada que viene de vuelta en Primera División. Bien dicen que el fútbol es un estado de ánimo, porque no hay nada como encadenar varias victorias seguidas para adquirir de nuevo la confianza y realizar el juego, brillante casi todo el partido, con el que hoy hemos disfrutado todos los seguidores y amantes de la cantera. Desde el primer segundo Las Palmas jugó con sentido, sin dar por perdido un balón, presionando en el centro del campo, con un David González y con un Javi Castellano en sus mejores horas, haciéndose dueños de su parcela, con una defensa que ha crecido mucho; sigue ascendente Vitolo, jugador rápido y de gran fortaleza, que lleva una buena racha de goles; apareció Javi Guerrero que hoy marcó el primer golazo del partido, abriendo las esperanzas de lo que al final fue una realidad (3-1).

Da gusto reencontrarse con el buen juego, con la efectividad, con la tranquilidad, con la paciencia, con el buen ambiente, con la alegría y las ilusiones, y sobre todo, con el reconocimiento, en este caso, a Juan Manuel Rodríguez, sin duda conocedor de esta perra categoría, con el que, durante algunos meses, nos hemos desesperado por no entender sus apuestas en los partidos. Lo grande del fútbol es que todos, periodistas, aficionados y hasta las directivas de los clubes, somos un poco entrenadores y opinamos acerca de los partidos, antes y después; esto me parece bien, pero creo que empequeñecería el entorno de este deporte el no ser justos y reconocer que, hoy, nuestro entrenador, ha salido a por todas, que ha dado en el clavo y que si hemos ganado también es gracias a él. De aquí para atrás, incluyendo algunas alineaciones incomprensibles y una floja apuesta por ganar partidos, jugaba como creía, y tal vez esto invita a la reflexión ¿estaba haciendo lo que debía hasta obtener un colchón de puntos suficientes para el sosiego? Repito, es una categoría de lo más perra en la que hay que llegar lo más pronto posible a una meta. Lo que sí espero es que, a partir de ahora, con el objetivo de la permanencia a punto de caramelo, veamos otros partidos como el de este sábado, y que tanto entrenador como jugadores disfruten con el juego, así, como lo han hecho hoy, y con el que hace rato soñábamos.

Ahora a esperar al Almería, a llenar otra vez este frío estadio, y a verlas venir. ¡Feliz semana!