MIRANDÉS: UN SUEÑO CUMPLIDO

Soñar despiertos es algo que siempre hacemos y llena nuestras vidas de esperanzas; son los sueños que de verdad controlamos, los que creamos para hacer nuestra existencia más llevadera. Además, soñar es gratis, de las pocas cosas que tenemos por las que no damos un céntimo de euro. Incluso los animales tienen sus sueños, aunque a estos les llegan cuando están dormidos.

Ayer vi el partido de vuelta de Copa del Rey entre el equipo de Segunda B, Mirandés (de Miranda de Ebro) y de un Primera como el Espanyol, y me puse a soñar despierta. El idealismo me condujo a proteger al débil, y deseaba que el equipo chico eliminase al grande, que David derrotase a Goliat, y mi sueño se cumplió. Hoy, sin tener un sueño que me desvíe de la realidad en la que vivo, reconozco lo grande que es el fútbol; la noche de ayer dejó con el culo al aire a los que piensan que las grandes gestas deportivas se consiguen a base de disputas, de tal o cual negociación secreta, de poner talones llenos de ceros en los despachos, o de firmar contratos millonarios, circunstancias que terminan endiosando a algunos futbolistas a los que previamente nadie les ha enseñado a digerir la fama, y mucho menos a controlar y ser generosos con el dinero que ganan, aunque, afortunadamente, no son así la mayoría . Lo que se vivió, demuestra que el tesón, la fe y la ilusión que se le ponen a los proyectos de la vida, sin mucho dinero mediando,  tarde o temprano darán su fruto, porque soñar despierto no es más que mentalizar, ver la consecución de lo que se desea obtener, y al final, ese sueño se cumple. Este, fue el de un entrenador, Pouso, y el de un grupo de hombres que se ganan la vida con diferentes trabajos, que no se concentran en la pretemporada en instalaciones especiales, que, salvo que se lo costeen, no les procuran gimnasios ni saunas, y que para entrenar tienen que trasladarse a muchos kilómetros de distancia. Sin embargo, ahora ya están en semifinales. Llegar hasta aquí, a priori,  era impensable para el Mirandés. Quizás, a partir de ahora, empezarán a construir un nuevo sueño .