Un blog de Malena Millares

sábado, 2 de junio de 2012

...Y LLEGÓ EL FINAL DE LA TEMPORADA


Esta tarde, después del encuentro UD Las Palmas-Sabadell, finaliza la segunda vuelta y en consecuencia la temporada 2011-2012 para los amarillos.
La situación en la tabla, sin el resultado de hoy, es la siguiente: décimo lugar, con cincuenta y cinco puntos.
A partir de ahora, tanto en medios de comunicación como en petit comité, los periodistas y aficionados emitiremos opiniones de todo tipo y de cualquier color, analizando la pasada campaña, elucubrando sobre el presente y futuro de nuestra Unión Deportiva Las Palmas, la de todos, porque en las tripas la llevamos sin remedio, y a mucha honra.

Atrás quedaron los últimos años en los que, hasta el final de las campañas, el sufrimiento fue el denominador común, donde parecía que todos los seguidores del equipo nos habíamos abonado no a un club, sino a un seminario de crecimiento interior, de cómo resistir ante la adversidad, de cómo dominar una situación álgida, hasta el punto de sentir, muchas veces, los latidos de nuestros corazones en las mismísimas gargantas, sentados ante el televisor o en las butacas del Gran Canaria. No ocurrió así esta vez, gracias al cielo. Nos sobraron jornadas para soñar, puesto que Juan Manuel Rodríguez y el equipo lograron bastante pronto la permanencia virtual en la categoría, aunque no supieron aprovechar la situación, ni tampoco el coraje y arrope de toda una afición que no dejó de alentarles hasta que matemáticamente perdieron sus opciones de jugar la liguilla. Es de apreciar, en parte, un final como este, sin sobresaltos y tensiones, aunque haya sido de lo más insulso e irrelevante. No sé si estábamos preparados para pasar del negro al blanco sin pestañear, y hemos tenido que transitar por la gama de los grises. No sé. El caso es que la directiva, desde hace semanas, está rompiéndose la cabeza pensando en la nueva temporada, buscando jugadores, nuevos fichajes, con la vista puesta en objetivos mayores que no sea sólo el de la permanencia, sopesando el posible cambio o no de entrenador, y descubriendo la manera, en medio de esta crisis, de captar nuevos abonados, preparando la publicidad, cosa muy normal a estas alturas, porque sin seguidores nada seríamos. Confío en un 2012-2013 lleno de ilusión, de apoyos a todos los niveles, y de miras más altas, porque al final si no se arriesga en el proyecto ni se gana ni se pierde, y la UD Las Palmas no tiene que pasear más como alma en pena por la Segunda A; los que tenemos algunos añitos debemos procurar que nuestros hijos y futuros nietos vean a la UD medirse con equipos de Primera, porque la propia entidad con su historia, la provincia, la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, su infraestructura, el número de habitantes, los aficionados y hasta nuestro estadio (aún con pistas) merecen estar en la liga BBVA.

Me encantan los refranes, no son más que sentencias de la sabiduría popular, basados en la experiencia de las personas; por eso quería despedirme, hasta la vuelta, con uno de ellos: “Yedra que no se pega al muro, tiene mal futuro”. Yo voy seguir siendo una hojilla cualquiera de esa enredadera, bien pegada al muro de mi equipo, y me gustaría que la mayoría hiciera lo mismo, porque quiero que tenga futuro.
¡Felices vacaciones y buen descanso!

No hay comentarios:

Publicar un comentario